El 30 de agosto se realizó una actividad de cierre de curso para jóvenes del Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (INISA) que culminaron exitosamente -con financiación y apoyo técnico de INEFOP- el curso de Soldadura Nivel 1 en la sede de Talleres Don Bosco, centro educativo responsable de la capacitación.
El objetivo principal de esta capacitación fue contribuir a la formación personal y profesional de jóvenes que se encuentran cumpliendo una medida socioeducativa en INISA, favoreciendo su inserción social y el desarrollo de la empleabilidad de los participantes, formados profesionalmente para ejercer en el oficio de Soldador.
Complementariamente, se busca generar la capacidad de definir un proyecto ocupacional individual, a corto y mediano plazo, con objetivos alcanzables, manteniendo la articulación con las redes y recursos existentes como forma de asegurar la sostenibilidad del empleo.
Por otra parte, se fomenta la incorporación de hábitos y códigos propios de la cultura laboral para ajustarse a los requerimientos del mercado en este rubro, conociendo obligaciones y ejerciendo derechos como trabajadores, así como el desarrollo de competencias técnicas vinculadas al oficio.
En el acto de cierre de curso, además de los jóvenes que egresan, participaron autoridades y técnicos de las instituciones que han intervenido en este proceso.
El director de Talleres Don Bosco, el Padre Sebastián Ferreira, habló de la esperanza de construir un futuro mejor que permita transformar vidas, con la educación técnica como herramienta clave para lograr el éxito en el mercado laboral. José María Caballero, encargado educativo de esa institución, agradeció a INEFOP por la constancia y perseverancia, que ha permito conocerse y crecer juntos dejando atrás los prejuicios, “esto es solo el inicio de lo que ustedes pueden alcanzar”, comentó.
Por INEFOP asistió el director general, Pablo Darscht y el director en representación de OPP, Pablo Puppo, además de referentes técnicos. “Se trata de que tengan una oportunidad y busquen más oportunidades a futuro”, planteó Darscht. Agregó que además de aprender a soldar, el saber del oficio, se llevaban también valores y experiencias de vida.
La presidenta de INISA, Lucía Curbelo, se refirió a la habilitación formal para desarrollar actividades laborales específicas y retomó la idea de “soldar” en este contexto, como la unión de conceptos y vivencias.
